En el corazón de nuestros viñedos se libra una batalla silenciosa pero vital para la integridad de nuestras cosechas. Esta lucha biológica es protagonizada por diminutos pero poderosos aliados que mantienen el equilibrio ecológico y aseguran la salud de nuestras plantas.
En Cortijo El Cura, abrazamos la biodiversidad como piedra angular de nuestra filosofía agrícola. Fomentamos el desarrollo de depredadores naturales como avispas y mariquitas, que eliminan orugas y pulgones. Abejas, moscas y mariposas garantizan la polinización, mientras que escarabajos y moscas descomponedoras reciclan nutrientes para el suelo.
Las mariquitas, conocidas por su capacidad para controlar pulgones, son frecuentes en nuestros campos gracias a la ausencia de tratamientos agresivos. Las abejas, con sus «pincelitos» y «bolsitas» en las patas, recolectan polen, y grillos, con oídos en las rodillas, demuestran la diversidad funcional de la fauna auxiliar.
La observación y apoyo a estos seres vivos no solo protege nuestras uvas, sino que también contribuye a la sostenibilidad del medio ambiente. Esta estrategia inteligente refuerza la calidad de los vinos de Cortijo El Cura y destaca la importancia de cada criatura en el ecosistema.
Este artículo rinde homenaje a los pequeños guerreros que aseguran la prosperidad de nuestros campos y la calidad de nuestros vinos. Su presencia testifica un ecosistema vibrante, recordándonos que cada criatura tiene un rol esencial en la naturaleza.
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